Entrevistamos a la doctora Anna Pomerantseva

Así nos cuenta Anna Pomerantseva lo que tenemos que hacer para cuidar nuestra piel en la entrevista que te mostramos a continuación:

¿A qué edad recomiendas los tratamiento con pinchazos?

Los pinchazos o tratamientos inyectables están de moda y constituyen una parte importante del mundo de la medicina estética. Pero existe la vida más allá de los pinchazos: están los tratamientos cosméticos y médicos tópicos, suplementos bioactivos, laserterapia, aparatologia etc. Y más que de la edad, deberíamos hablar de la indicación en cada caso particular. Hay pieles que genéticamente se mantienen jóvenes y sanas más tiempo y hay otras que envejecen de forma prematura.

Por supuesto, no hay que olvidar la importancia que tiene el estilo de vida. Ya se sabe que una buena alimentación, la actividad física moderada y evitar los hábitos tóxicos (tabaco, alcohol, contaminación, etc.) es la base de nuestra salud y también ayudan a mantenerte joven más tiempo. Parece que esto se ha repetido tantas veces, y es tan obvio, que deja de ser importante. Pero un ojo experimentado distingue con facilidad una paciente fumadora de una no fumadora ¡por su aspecto de la piel!

También lo que hacemos con nuestra piel en casa y nuestra visión de la vida influyen mucho. Puedo decirte que veo chicas de 25-30 años con una piel de 40, pero también, cada vez más, por suerte, veo mujeres de 50 que no aparentan más de 35. Y no me refiero solo a no tener arrugas. Es un todo: la forma de hablar, moverse, vestir, pensar…

Creo que hemos llegado a un momento de desarrollo social, cuando podemos y debemos cuidarnos para sentirnos bien. Y no hace falta tirar la casa por la ventana. Existen formas y técnicas de cuidarse accesibles para todo el mundo. Solo hay que definir las prioridades.

¿Y si nos da miedo pincharnos? ¿Hay cremas milagro? ¿Se deben reforzar los tratamientos cosméticos con las agujas?

Un buen cuidado de la piel, constante, a diario y con las cremas adecuadas es la base de todo. No creo en cremas milagro, pero sí en las adecuadas para cada tipo de piel. El estado de la misma varía en función de la estación del año, nivel de hidratación, estado hormonal, etc. Tenemos que observarla con atención y adaptar el cuidado cosmético en función de lo que cada piel necesite.

Muchos de los signos de la edad de la piel se pueden prevenir o incluso atenuar solo con un buen tratamiento cosmético y médico tópico, sin agujas. Y para lo que no tenga solución, se debe complementar con algún tratamiento inyectable. Pero solo lo justo y necesario.

En mi práctica diaria veo que muchas veces el factor determinante es el miedo. Realmente el dolor físico en nuestros tratamientos lo evitamos con la anestesia adecuada. Pero lo que está claro es que la primera vez siempre es la más difícil. Cuando conoces el tratamiento y lo repites, ya se lleva de otra manera.